Cumplo cincuenta y nueve tacos. Inevitablemente estas fechas de la historia negra de la Humanidad (11-S) obligan a mirar atrás. Y cuando uno se vuelve viejo mira más hacia atrás que hacia adelante. En esta mirada me queda más que agradecer que reprochar. Si no hubiese medíado alguna gente, como Ignacio Lomba, el patrón del "Carmen Pilar" que me recogió a veinticuatro millas al Oeste de Cíes, no lo hubiese podido contar, y mi vida no hubiese dado tanta risa durante tanto tiempo. Si no hubiese alguna mujer que me ha amado y a la que amé nunca tendría la percepción que tengo de la vida. Si no fuese por algunos amigos que me enseñaron, ninguno de mis proyectos hubiese salido adelante. Unos y otros han vuelto y están en mi vida, vivos y muertos se juntan en la memoria. No quiero pensar que hubiese sido todo sin el permanente y muchas veces sacrificado apoyo de mi Santa. Cuidó de mis padres y de mis hijos como si fuesen suyos, y a veces eso fue dificil. Ha dado mucho en estos dieciocho años, y lo ha hecho divertido, sin dramas.
No me ha salvado de un naufragio, pero me ha dado fuerza para salvarme en todos.
Gracias, Concha.
No me ha salvado de un naufragio, pero me ha dado fuerza para salvarme en todos.
Gracias, Concha.
Que bien escribes Mera, parece que escucho música cuando leo tus relatos, me dan paz y me apeno cuando los termino. Gracias y feliz cumpleaños.
ResponderEliminarSesé.
Amigo farero: De viejo nada, yo soy mayor que tu siete meses y no soy vieja. La edad está en el cerebro el cuerpo sólo se arruga por falta de cambio de traje . Veremos si la ciencia o nos llega a tiempo para poder reponerlo que lo otro esta que "flipas".
ResponderEliminarUn abrazo con los correspondientes tirones de orejas y para esa mujer que ya admiro, un buen biquiño "Detras de un gran hombre siempre hay una gran mujer" hoy queda otra vez demostrado
Apertas
Felicidades, amigo.
ResponderEliminarY felicidades a tu Concha por tener a su lado una persona como tú que sabe reconocer con gratitud lo que ella hace por ti.
Ella sí que es un faro.
Un abrazo.
Sesé.- Eres muy amable. Lo que me dices es mucho más de lo que aspiro.
ResponderEliminarMuxica.- A mi se me arruga hasta el cerebro. Aquí la gran mujar va por delante, en muchas cosas. Gracias y un beso.
Codorniú.- Gracias, camarada.
Tu Santa es una genia y vos también. Es muy importante ser agradecido.
ResponderEliminarMuchas gracias :-)
Besos,
Sylvia.- Muchas gracias, pero no es para tanto...Un abrazo como el Atlántico.
ResponderEliminarBesos para Concha
ResponderEliminarAlberto I de Velilla.- Concha es una mujer normal, solo besa a desconocidos y a ti te conoce por el blog. Su hijo me decía al saludarme que solo me faltan diez años para el número mágico. Gracias por venir.
ResponderEliminarFelicidades, Mera!!! todos necesitamos quien nos rescate en un naufragio, un faro que nos guíe, y buena compañía a bordo... tu los tienes... ENHORABUENA Y QUE VENGAN MUCHOS MÁS!!!
ResponderEliminarIsabel.- Muchas gracias por tu precioso comentario. Los que vengan serán bienvenidos. Aun me quedan proyectos, a veces demasiados.
ResponderEliminarLlego tarde por haber andado por ahí, pero llego, para felicitarte por haber llegado tan lejos.
ResponderEliminarAyudado quizá, como dices, por el patrón, las mujeres, los amigos y "tu santa", pero también gracias a tí mismo.
Un fuerte abrazo y muchas felicidades farero cuentanubes, buen narrador de historias ;-)
Jorge.- Muchas gracias. Es siempre un placer seguir con gente como tú y todos los que mencionas.
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