Os pongo una muestra de a donde nos pueden llevar algunos en cuyas manos hemos depositado nuestro futuro. Es una colaboración internáutica de Miguel Angel Sanchez Terry, Torrero de Faros, actual Encargado del Balizamiento de la Autoridad Portuaria de Tarragona.
Nada de esta entrada es mío, ni siquiera la búsqueda. En los enlaces se pueden ver los autores, que han hecho un interesante trabajo de denuncia e investigación.
Mera.
12Ene2009
Faros radiactivos abandonados en el ártico ruso
Faro nuclear abandonado en la costa rusa en English Russia.
La anotación Abandoned Russian Polar Nuclear Lighthouses (Faros nucleares abandonados en el ártico ruso), ilustra con varias fotos el estado de deterioro de uno de las decenas de faros con generadores nucleares que existen a lo largo de la costa más al norte y más remota de Rusia.
En la época de la Unión Soviética, el Partido Comunista decidió construir una cadena de faros que guiaran a los buques en los oscuras y largas noches polares a través de las costas inhabitadas del país [...] Al estar situados en zonas a cientos de millas de cualquier lugar habitado los faros debían ser totalmente autónomos [...] Se optó por instalar pequeños generadores nucleares que proporcionarían electricidad a los faros durante años, sin necesidad de intervención humana.
La historia, como no podría ser de otra manera y aunque es un episodio no concluido, no salió según lo previsto: el colapso de la Unión Soviética llegó hasta los faros nucleares de las remotas tierras del norte.
Éstos dejaron de funcionar tiempo después, principalmente debido a la llegada de buscadores de metal que los asaltaron para llevarse todo lo que encontraran en su interior –incluyendo tal vez una buena dosis de radiación.
En 2003 en Cabo Pihlissar, cerca de Kurgolovo, se encontró el generador radiactivo de uno de estos faros a unos 200 metros de éste, “sumergido en aguas poco profundas del Már Báltico”.
Buscando más al respecto encontré el artículo Control Remoto: Desmantelando RTGs [PDF, 184 KB], de Malgorzata Sneve, publicado en la Agencia Internacional de la Energía Atómica (IAEA por sus siglas en inglés) donde cuenta un poco más acerca de los faros nucleares.
Los faros utilizan un tipo de Generador Termoeléctrico de Radioisótopos (GTR), “un simple generador eléctrico que se alimenta por desintegración radiactiva.”
Los GTR se pueden considerar como una especie de batería y se han empleado como fuentes energéticas en satélites, sondas espaciales e instalaciones remotas sin personal, como los faros. En general, los GTR son las fuentes más adecuadas para sitios sin personal ni mantenimiento, que necesitan apenas unos centenares de vatios, o menos, de energía durante períodos demasiado largos para que resulte económico alimentarlos por medio de células de combustible, baterías o generadores, y son también adecuados allí donde no son viables las células solares.
Es el tipo de fuente de energía que proporciona electricidad a diversas sondas espaciales, entre otras la míticas sondas Voyager –lo que las permitió seguir funcionando y enviando datos aún cuando estaban ya muy lejos de la luz solar.
A diferencia de una central nuclear, en un GTR no puede producirse una fusión del núcleo ya que no hay reacción en cadena ni hay fisión.
En un GTR el calor se libera al desintegrarse un material radiactivo y se convierte en electricidad por medio de una serie de termopares.
Es decir, que la energía se produce a partir del calor originado por el GTR. Por tanto el riesgo tiene su origen en el propio material nuclear en descomposición. Los GTR utilizan normalmente estroncio-90 que está clasificado como fuente de categoría 1: máxima peligrosidad que puede producir graves quemaduras y la muerte por exposición.
De hecho, en Georgia en 2001 y 2002 aparecieron varios GTR del mismo tipo, de origen soviético, abandonados en bosques y los cuales causaron graves lesiones y quemaduras a los leñadores y pastores que los encontraron en los diferentes casos.
Actualmente todos los GTR instalados en los faros han superado su tiempo de vida. Según el Organismo Federal de Energía Atómica de la Federación de Rusia (Rosatom), de entre los más de 650 GTR que es necesario retirar y sustituir en Rusia, 200 está (o estaban) instalados en faros de las regiones de Murmansk y Arkhangelsk, una región relativamente cerca de Noruega.
Precisamente Noruega colabora desde finales de los 90 para llevar a cabo la retirada, lo antes posible, de todos los GTR de la región noroeste de Rusia. Una colaboración que, a pesar del riesgo del proceso, de momento ha conseguido retirar un tercio de los GTR sin incidentes .
12Ene2009
Faros radiactivos abandonados en el ártico ruso
Faro nuclear abandonado en la costa rusa en English Russia.
La anotación Abandoned Russian Polar Nuclear Lighthouses (Faros nucleares abandonados en el ártico ruso), ilustra con varias fotos el estado de deterioro de uno de las decenas de faros con generadores nucleares que existen a lo largo de la costa más al norte y más remota de Rusia.
En la época de la Unión Soviética, el Partido Comunista decidió construir una cadena de faros que guiaran a los buques en los oscuras y largas noches polares a través de las costas inhabitadas del país [...] Al estar situados en zonas a cientos de millas de cualquier lugar habitado los faros debían ser totalmente autónomos [...] Se optó por instalar pequeños generadores nucleares que proporcionarían electricidad a los faros durante años, sin necesidad de intervención humana.
La historia, como no podría ser de otra manera y aunque es un episodio no concluido, no salió según lo previsto: el colapso de la Unión Soviética llegó hasta los faros nucleares de las remotas tierras del norte.
Éstos dejaron de funcionar tiempo después, principalmente debido a la llegada de buscadores de metal que los asaltaron para llevarse todo lo que encontraran en su interior –incluyendo tal vez una buena dosis de radiación.
En 2003 en Cabo Pihlissar, cerca de Kurgolovo, se encontró el generador radiactivo de uno de estos faros a unos 200 metros de éste, “sumergido en aguas poco profundas del Már Báltico”.
Buscando más al respecto encontré el artículo Control Remoto: Desmantelando RTGs [PDF, 184 KB], de Malgorzata Sneve, publicado en la Agencia Internacional de la Energía Atómica (IAEA por sus siglas en inglés) donde cuenta un poco más acerca de los faros nucleares.
Los faros utilizan un tipo de Generador Termoeléctrico de Radioisótopos (GTR), “un simple generador eléctrico que se alimenta por desintegración radiactiva.”
Los GTR se pueden considerar como una especie de batería y se han empleado como fuentes energéticas en satélites, sondas espaciales e instalaciones remotas sin personal, como los faros. En general, los GTR son las fuentes más adecuadas para sitios sin personal ni mantenimiento, que necesitan apenas unos centenares de vatios, o menos, de energía durante períodos demasiado largos para que resulte económico alimentarlos por medio de células de combustible, baterías o generadores, y son también adecuados allí donde no son viables las células solares.
Es el tipo de fuente de energía que proporciona electricidad a diversas sondas espaciales, entre otras la míticas sondas Voyager –lo que las permitió seguir funcionando y enviando datos aún cuando estaban ya muy lejos de la luz solar.
A diferencia de una central nuclear, en un GTR no puede producirse una fusión del núcleo ya que no hay reacción en cadena ni hay fisión.
En un GTR el calor se libera al desintegrarse un material radiactivo y se convierte en electricidad por medio de una serie de termopares.
Es decir, que la energía se produce a partir del calor originado por el GTR. Por tanto el riesgo tiene su origen en el propio material nuclear en descomposición. Los GTR utilizan normalmente estroncio-90 que está clasificado como fuente de categoría 1: máxima peligrosidad que puede producir graves quemaduras y la muerte por exposición.
De hecho, en Georgia en 2001 y 2002 aparecieron varios GTR del mismo tipo, de origen soviético, abandonados en bosques y los cuales causaron graves lesiones y quemaduras a los leñadores y pastores que los encontraron en los diferentes casos.
Actualmente todos los GTR instalados en los faros han superado su tiempo de vida. Según el Organismo Federal de Energía Atómica de la Federación de Rusia (Rosatom), de entre los más de 650 GTR que es necesario retirar y sustituir en Rusia, 200 está (o estaban) instalados en faros de las regiones de Murmansk y Arkhangelsk, una región relativamente cerca de Noruega.
Precisamente Noruega colabora desde finales de los 90 para llevar a cabo la retirada, lo antes posible, de todos los GTR de la región noroeste de Rusia. Una colaboración que, a pesar del riesgo del proceso, de momento ha conseguido retirar un tercio de los GTR sin incidentes .
Cuánta basura va soltando el hombre por el mundo, y cuánto desconocemos. Espeluzna saber estas cosas, descubrir hasta qué punto se han adoptado medidas arriesgadas sin medir o analizar las consecuencias en toda su dimensión a medio y largo plazo. O lo que es peor, que sí se han analizado y ha dado igual. Muy interesante la entrada, Mera. Yo personalmente no tenía ni idea de que existían este tipo de faros y que estaban abandonados en estas condiciones. Como técnicamente tengo menos idea aún, he seguido lentamente (pero con interés) tu explicación.
ResponderEliminarUn beso.
Tamara.- Gracias, pero la explicación no es mía. He modificado la entrada, para que nadie lo crea así. Adoro los avances tecnológicos, pero estando el mundo en manos irresponsables, estas cosas dan yuyu. Hay más fotos muy tristes en los enlaces.
ResponderEliminarUn beso y gracias por el esfuerzo.
No dejas de sorprenderme José Antonio. Interensantísima entrada.
ResponderEliminarNunca te acostarás sin saber una cosa más... aunque, la de cosas de este tipo que quizá mejor no saber.
Hay "progresos" que acabarán con nosotros.
Gracias por hacernos llegar esto.
Un abrazo.
pff que angustia existencial, una màs de las que dan terror de muerte, porquè la causan .Con cuantas cosas màs està envenenado el planeta?...hablo de las que desconocemos ...
ResponderEliminarPf Mera interesante aunque preocupante, pobrecitos faros... con tan bellas historias venir a discordar con èsto !
Gracias, un abrazo!
Joder, se me acaban de quitar las ganas de fotografiar todos los faros del mundo.
ResponderEliminarNautijorge.- La verdad, preferiría no haberlo leido, la serie de fotos es de lo más deprimente y los enlaces te dejan aterrado. Gracias por venir, un abrazo.
ResponderEliminarShe.- Te digo lo mismo, como diría Carlos Oroza, cuando todo falla nos queda la poesía.
Juan Miguel.- No todos los faros están así, hay muchas casas rurales. Todo cambia muy deprisa. Sigue con tus fotos, son preciosas.
Por cierto, se me olvido comentarte, tengo un tío en Bilbao que también fue rediotelegrafista, él en petroleros y superpetroleros de navieras extranjeras.
ResponderEliminarMe dejas de piedra...
ResponderEliminarConoces este mundo todo al dedillo. Aunque sea a través de otros.
Gracias por traerlo ante nuestros ojos.
Un abrazo, amigo.
Pepe.
(Te dejo una entrada para ti en Taberna Lentiscal)
Juan Miguel.- No es grave, le puede pasar a cualquiera.
ResponderEliminarCodorniu.- Visitar tu página es un curso de lengua y literatura. Estás de un necrológico que te sales y a pesar de ello rezumas pasión.