Volvimos a Bueu, después de pasar una semana bastante divertida en Ons. El faro estaba lleno de gatos, Jaume Frontera que nunca se caracterizó por su orden, entonces soltero, dormía en un colchón sobre el suelo, muy de moda entre los jóvenes y vaya usted a saber como, nosotros regresamos a tierra con unos picores bastante molestos, dermatólogo y diagnóstico: Sarna. Se lo comenté a un amigo y me dijo: El Yacutín es el perfume de los mariquitas modernos. Me tranquilizó mucho.
Héctor, mi hijo, también estaba muy contento, en medio de la disolución del matrimonio de sus padres encontró un indicador de identidad familiar. Le decía a todo el mundo:
-Pillé la sarna y se la contagié a mis padres. Como si nos hiciese un regalo.
La verdad es que tampoco le dijimos que no lo comentase. Aquella fue una época bastante sarnosa en mi entorno, es posible que fuese por la proliferación de gatos y perros sarnosos, o por una promiscuidad bastante feroz que resultaba bastante gratificante.
-Pillé la sarna y se la contagié a mis padres. Como si nos hiciese un regalo.
La verdad es que tampoco le dijimos que no lo comentase. Aquella fue una época bastante sarnosa en mi entorno, es posible que fuese por la proliferación de gatos y perros sarnosos, o por una promiscuidad bastante feroz que resultaba bastante gratificante.
Tal vez para huir de esta vida disoluta, Gonzalo decidió hacerse navegante solitario y contrabandista de hachís. Entre sus muchas actividades esta fué la más sorprendente para mi. No era una persona interesada, era rico por su casa, era joven y guapo, tenía éxito en todo lo que se proponía, nunca entendí por qué lo hizo. Supongo que porque su droga fundamental era la adrenalina.
Zarpó de Vigo hacia el Sur, le acompañaba su hermana y su cuñado, el tiempo se puso del Oeste duro y Gonzalo empezó a estar agotado, sus acompañantes no podían relevarle, pues era la primera vez que hacían un viaje largo y estaban literalmente destrozados. Se refugiaron en un pequeño puerto, Sâo Martinho do Porto, que con marea baja dejaba el barco en seco. Allí desembarcaron sus acompañantes y contactó con un pesquero que remolcó al "Celina" a cambio de veinte mil escudos hasta Cabo San Vicente y desde allí siguió solo hasta Algeciras.
Desde Algeciras perpetró su banda internacional de traficantes de hachís.
El sistema era el siguiente: el proveedor después de una llamada de teléfono le llevaba un kilo de hachís hasta una playa a donde Gonzalo llegaba remando, en la zodiak del barco que quedaba fondeado, previo despacho en Nador o Tanger. Gonzalo le pagaba, cargaba con su kilo de hachís y volvía a un astillero donde pagaba estancia por el barco. Dejaba allí el "Celina", tomaba un autobús y vendía el hachís en Granada, ¡al por menor!!, imagino que por la coña de ser un traficante de circuito completo, al cabo de una semana volvía tan calentito a Algeciras y al mes siguiente salía de viaje a Tanger o Nador. Despachaba el barco puntual y legalmente, así el "Celina" tiene en su despacho de salidas doce depachos en un año a Marruecos. En uno de los viajes a Granada se levantó un furioso temporal de Levante en fin de semana. En el Astillero no había nadie y el barco se golpeó con las olas contra el muelle hasta producirse una vía de agua que lo hundió. El seguro pagó la reparación, que fue una estafa por parte del reparador, por lo que vi cuando compré el barco, excluyó al Celina de sus clientes y Gonzalo se llevó esta vez el barco al Club Náutico de Algeciras. Vino a verme a Cabo Estay y me contó sus aventuras, lo contaba muy bien y muy divertido. Venía acompañado de una bella joven depresiva y de profesión bibliotecaria.
Me pidió el fuera borda que empleaba cuando no había viento en mi chalana a vela y me dijo que me lo devolvía en un mes. No pudo. Su propósito era cruzar el estrecho con la zodiak y traje de neopreno, recoger el kilo hachís como quien pasa un día de pesca submarina en Tanger y volver. El temporal de levante lo volvió a joder. Cuando ya tenía acordada la entrega se rebotó el Levante y tuvieron que viajar en el ferry, decidieron volver en avión por Gibraltar con el hachís en sus estómagos.
A los dos días fue condenado junto con su amiga a un año de prisión del que cumplió seis meses en el penal de Gibraltar. Herminio, su padre se hizo cargo del barco, que le compró por setecientas mil pesetas.
Cuando salió de prisión se vino a pasar unos días conmigo y le pregunté como había sido el juicio.
Me contó que le detuvieron previa detección con rayos equis de las bolas en su estómago y la espera de un día a que su amiga evacuara, pues alegó que estaba embarazada.
- Contraté un abogado, hace más de diez años que no hablo inglés, no entendía nada, pude entender que el abogado para quitarle hierro al delito, decía "culeros" y como que no son nada importantes, y volvía "culeros" y toda su defensa era "culeros..."
Poco después Herminio Viana me ofreció pasar las vacaciones en el "Celina" y que llevase una tripulación.
Aquel viaje lleno de aventuras supuso al final la vuelta del "Celina" a Galicia, pero aún volvería a Marruecos, las Baleares y el Mediterraneo norteafricano.
Lo malo conmigo es que vas a Italia y acabas en Argelia y quieres ir a Baleares y acabas en la Coruña.
Herminio Viana quería hacer un placentero viaje por el Mediterrano, le convencí de subir en barco hasta Vigo, su intención era subirlo despues del crucero en un trailer, subió navegando. Con muchos incidentes, pero navegando.
Próximo Capítulo: Una tripulación de lujo. El Celina llega a Vigo.
Leo esto y pienso, qué vida aburrida que tuve. Me pasa lo mismo cuando leo a nuestro amigo Fontimbras.
ResponderEliminarPero después pienso que no estuvo tan mal y QUE LO MEJOR ESTA POR VENIR!!
Un beso,
Caro amigo, como sempre nos tem habituado belo post !
ResponderEliminarUm abraço
Sylvita.- Espero que así sea para todos. Un beso.
ResponderEliminarChana.- Obrigado, o pracer é mútuo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarA mi tambien me hubiera gustado, en mi juventud, navegar en el Celina, pero no he pasado de hacer algunos recorridos por las rias bajas en yates a veces de vela y a veces de motor, de amigos. Ya sabes el dicho: "Es mejor tener amigos con yate que tener un yate".
ResponderEliminarMi experiencia marinera mejor fue periodistica y en trasatlántico. Cuando Galvao y un grupo de gallegos tomaron el "Santa María" en el Atlántico, poniendole el nombre de "Santa Libertade", fueron reducidos y encarcelados dentro del barco que puso proa a Las Palmas. Un grupo de periodistas españoles y portugueses fuimos en avión al puerto canario, en su espera y las autoridades portuguesas nos dejaron subir e incluso navegar hasta Lisboa, aunque no nos dieron camarote, pero había lanchas salvavidas y colchonetas. Creo que es una aventura que habré de contar. Me acompañaba nuestro paisano, y sin embargo amigo, Antonio D. Olano.
Un abrazo y hasta pronto
Algún dia iré por tu pueblo y charlaremos.
Ayyyy, qué vida más intensa la del querido "Celina" y sus ocupantes. Cómo une caminos y enlaza vidas el mar. Cómo enreda en negocios y aventuras, cómo nos engancha a los que te leemos...
ResponderEliminar¿La sarnaaaa? Desde luego, que sarna con gusto no pica, sobre todo con un viaje así y si para el pequeño Héctor era motivo de orgullo. Hay heridas en batalla que hay que lucir con orgullo, porque encierran una historia detrás con la que siempre dejas con la boca abierta.
Quiero saber qué paso camino a Vigo, pero también esos tumbos y cambios de itinerario que prometes cuando se viaja contigo...¡¡vas a Italia y terminas en Argelia!!
Me encanta...continúa continúa...siguiente capítulo.
Me encanta leerte.
Muchos besos.
Fortimbras.- Ven cuando quieras, será un placer. C.E. en mi perfil.
ResponderEliminarCumplí veinte años de tercer Radio del Montserrat, casi antes de su desguace.
Un abrazo.
Tamara.- Me gustaría decir: me encanta leerme, pero me gusta mucho más leerte a ti. Seguiré.
disfrutar de la aventura......da vida........
ResponderEliminargenial y bravo por ellos
Aunque tus posts aparecen consecutivos, a mi no me engañas. Yo he estado en la balaustrada una semana, expuesta al sol y al salitre, ahora sé como debió sentirse la mujer de Lot. Parece que el material del que está hecho el Celina y los iones díscolos de Gonzalo Viana reaccionan peligrosamente. Un tipo peculiar este amigo tuyo. Me hubiera gustado que profundizaras en eso de la sarna, solo por curiosidad morbosa.
ResponderEliminarBeso
Me divertí mucho con esta narración. Sentí que estaba allí, fue muy real, muy tangible.
ResponderEliminarLeo esto y luego miro el cielo nublado, y pienso que mi aburrimiento de post-almuerzo llorará al recordar tu relato.
:)
Un abrazo.
Hombre, el nombre que me pusiste en el link me hace ruborizar!
ResponderEliminar:)
Gracias.
Steve.- El Celina pasó una noche en tu isla. No pude pasar más tiempo pues tenía que entregarle a mi hijo a su madre que vive en Palma. En las próximas entradas pondré fotos, si las encuentro que estamos en obras. Gracias por venir. Un abrazo.
ResponderEliminarFermina.- Gonzalo era un personaje, irán saliendo más cosas. Su muerte, esperada, ha dejado un vacío que lleno de recuerdos divertidos. En lo de la sarna solo se profundiza rascando, es mejor no hacerlo, ni por morbo.
Un beso.
Arcangel.- Y yo creyendo que tus rubores eran pasión por mi apostura, y eran un puro enlace...
Tengo rubores varios.
ResponderEliminar:)
Gilda.- Es un placer saberlo, es que vives y sientes. Y si tienes veinticinco años, no he conocido a nadie de esa edad con tanto criterio y talento, es un don.
ResponderEliminarTu amigo FORTIMBRAS nos recordó el episodio del Santa María y a mí que meu pai viaxou a Montevideo no Santa Maria nos anos cinquenta.
ResponderEliminarMera: vaya coraje el de tu amigo traficante de a ratos.
En fin, personajes curiosos los de tu vida.
Mecos
Puri.- Tardo en darte las gracias, pero siempre te quiero.
ResponderEliminarBuenos días
ResponderEliminarYa se q las ha escrito hace mucho tiempo , pero
Me han fascinado sus historias del Celina con Herminio Viana.
Soy el nuevo dueño,con mi hermano del Catuxa II, el NW40 q tenía Herminio, nos lo vendió en el 2003
Queria contactar con usted para comentarle unas cosas del Catuxa, si fuese posible.
Mi mail es xmveiga@hotmail.com
Un saludo